28/8/08

Dangerous... for your mind

Ayer unos pocos elegidos debido a nuestra superioridad genética fuimos elegidos para presenciar un espectáculo al alcance sólo de las mentes más supremas. Un brillante ejercicio de cinefilia freak, la caspa hecha película, el summum de las pelis cutres. Porque sí, señores, Nicholas Cage ha decidido hacerse un implante de pelo y rodar una obra maestra sólo a la altura de la mítica Tiempo Límite:


Antes de que sigáis leyendo, advertiros de que pienso destripar el 100% de la peli, así que si alguna vez queréis deleitar vuestras retinas con semejante espectáculo os aconsejo que apaguéis el ordenador y os metáis jaco en vena, que seguro que os fastidiará menos la salud que ver este filme.

Nicholas Cage es un asesino a sueldo que trabaja para pagarse el ya mencionado implante de pelo. El tío se va a Bangkok a ver putas, y de paso a pelarse 4 pavos para ganar más pasta para ocultar esas entradas. Allí conoce a un chaval al que nos referiremos como El Chinaco, y se establece entre ellos una relación maestro-alumno que ni Karate Kid y el señor Miyagi. El Chinaco iba para repartidor del Telepizza, así que Cage lo usa para que le haga los recados. Se descubre que El Chinaco es Supermán disfrazado, ya que después de una paliza skin con bates de béisbol que le debería haber producido serios desgarros en todos sus órganos, es capaz de correr los 100 metros con un pesado maletín en la mano y orinando encima de la cabeza de Usain Bolt.

Mientras Cage se pasa el día en su casita de alquiler, deprimido por su calvície, El Chinaco se encarga de hacer todos los recados sucios y de jugarse el pellejo por su maestro. De paso, conoce a una bailarina puta en una discoteca donde siempre suena la misma canción. Cage se limita a salir de vez en cuando a hacer submarinismo en una piscina de 3.000 metros de profundidad, lo normal para una piscinita de hotel. También va con su moto, ya que tiene que vacilar de las habilidades adquiridas en otro de sus bodrios, El Motorista Fantasma, pero como la edad no perdona y los reflejos van disminuyendo, casi de desgarra el brazo con un palo que llevaba un niño que había salido a matar guiris.

Aquí entra en juego uno de los elementos metafóricos más presentes a lo largo de todo el metraje: los espejos. Un magistral plano donde se juega con el reflejo del protagonista crea confusión sobre cuál es el brazo que Cage se ha herido, poniendo en evidencia la estupidez de algunos de los espectadores (que, a estas alturas de la peli, tienen la inteligencia ya muy mermada). Los reflejos llegan al punto de que el prota, viendo el reflejo de un malote en un embudo de metal, es capaz de decir hasta cómo calza. Aunque ya lo digo yo: calza Converse falsas del mercado negro, ya que en esta peli todos los esbirros que acaban muriendo llevan Converse falsas.

Cage va a la farmacia a por Viagra y Pilexil y entonces se acuerda de que tiene pupa en el brazo. Es entonces cuando se da cuenta de que a él no le van las putas, sino las farmacéuticas sordomudas chinas y planas. Es entonces cuando empieza un tórrido (siiiii...) y ruidoso (claaaaaro...) romance entre ambos. En realidad, lo más picante que tiene el romance es el perro frito que se comen en un restaurante y que hace aparecer sudor en las despobladas entradas de Nicholas. Destacar que la peli no desaprovecha la oportunidad de enseñarnos el arte del lenguaje de signos, aunque me da a mí que no se deben haber documentado mucho a la hora de hacerla, porque esos gestos tan explícitos los entendía hasta yo. A Cage le va tan bien la vida que le da por girar los cuadros de su casa para celebrarlo. Es entonces cuando descubrimos que en Bangkok los cuadros se pegan a las paredes con imán, como las figurillas de la nevera.

Pero todo se tuerce cuando al Chinaco lo secuestran y le pegan una paliza por chuscar con la bailarina puta en los servicios de la disco. Además, la relación entre Cage y la farmacéutica se rompe porque éste salpica de sangre su blusa preferida. Nicholas decide partir en misión suicida a rescatar al Chinaco. Aquí tengo una laguna mental de 30 minutos (el cerebro tiene a bloquear las experiencias traumáticas).

Finalmente, Cage rescata al Chinaco pero su vida ya no tiene sentido ya que las manchas de sangre no se van tan fácilmente de las blusas blancas. Así que decide abrazarse al malote (es normal que esté falto de cariño ya que la sordomuda no le ha dado mucho...) y pegar un tiro a ambos. La peli nos sorprende entonces con un recurso estilísctico revolucionario: el fundido en negro. Y uno se siente orgulloso de haber contemplado el segundo final más cutre de la historia del cine. ¡¡¡Mentira!!! Luego sale El Chinaco en una escena de lo más intelectual, a cámara lenta, mirando al horizonte con cara de estreñido mientras suena música melancólica. Y fin. Objetivo cumplido, ya estamos ante el final más lamentable que se ha hecho jamás.

Película recomendada a todos los que no aprecien su vida lo suficiente. Se recomienda verla con la misma actitud que visteis Planet Terror: todo es caspa, todo es risa, esto que estoy viendo es tan malo que debe ser hecho a propósito. De lo mejorcito que hemos visto desde Tiempo Límite, y eso son palabras mayores.

3 comentarios:

Luke dijo...

Que pelazo que tiene Nicolas Jaula que le empieza tarde y le acaba a las 3 y media eh xD

Per cert el Nicholas Cage és amic de l'Eugeni té una habitació plena de còmics de superherois! I lo de CAGE li ve d'un que es diu Luke Cage XD personatge de Marvel xD a més a més el seu fill té el nom kriptonià de Superman xD, personatge que ell volia fer i no el van deixar XD. Almenys fent Ghost Rider quedaria content! Que no és tant mala peli com tu dius tampoc XD

eugeni128 dijo...

Desde kuan tinc comic de Marvel? jaja, tu flipes, sera amic teu

La unica peli del Cage ke tinc es "El señor de la guerra" xD

I sobre la peli no se, no la he vist ni l'havia sentit i tampoc m'he llegit la parrafada per mandra jeje

eugeni128 dijo...

Ah, de peli casposa no hi ha cap com "Casi 300", vaya peli... rius una mica el tros "gta" i lo demes sobra...