Presentación con kalimotxo

Me acabo de dar cuenta de que he abierto el blog sin presentarme, y eso es de mala educación. Si no lo corrijo iré al infierno, donde Satanás y Sadam Hussein me obligarán a contemplar sus largas sesiones de sodomización. Y qué mejor forma de presentarse que transmitiendo la enseñanza de un noble y sano deporte que tantas horas de satisfacción nos ha dado. Soy uno de los que en el vídeo que sigue aparece practicando (y bastante bien) el arte del Toro. Sí, este párrafo de introducción está cogido con pinzas y sólo sirve para inaugurar la sección “frikismo etílico” de este blog sin dar una completa imagen de borracho. Sabíais que este vídeo iba a aparecer por aquí, y más vale pronto que tarde para poder dejar claro cómo nos las gastamos en este blog, XD.

Para practicar el Toro se necesitan los siguientes elementos:

1.- Una olla/cubo/orinal grande con ingentes cantidades de algún tipo de sustancia estupefaciente. Especialmente recomendada la sangría Don Simón ó el calimocho hecho con cocacola del Lidl.

2.- Todas las monedas de 5 céntimos que podáis juntar. A poder ser tan guarras que no se distinga el número, las monedas limpias son para pijos.

3.- Una mesa a la que no le tengáis mucho cariño. Más que nada porque va a acabar como la cara de Niki Lauda.

4.- El Trapo de la Mierda. Descubrimientos recientes apuntan a que unos buenos candidatos a Trapo de la Mierda son las servilletas chingadas de los chinos.

5.- El Alan con una cámara diciendo frases míticas.

6.- Una botella de Cutty Shark que ofrecer en sagrado sacrificio al Dios del Hia una vez finalizado el ritual.

7.- Tantos vasos de chupito como degenerados se vayan a batir en duelo singular.

Y ahora es cuando tocaría explicar las reglas, pero creo que quedarán bastante claras con el vídeo: